Luis Abinader en LA Semanal. (Foto de archivo: Vladimir Santos/El Nuevo Diario)
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El presidente Luis Abinader afirmó este lunes que la liberación de RD$81 mil millones en liquidez autorizada por la Junta Monetaria al Banco Central (BC) tiene como propósito principal incentivar el crecimiento económico nacional, el cual ha sido impactado por factores externos como los conflictos geopolíticos y el alza global de tasas de interés.
“Evidentemente que las medidas y la situación mundial, con una serie de factores y una serie de acciones que hemos tenido que tomar, pues el tema de la tasa, las tarifas, ha disminuido el crecimiento mundial y nos va a afectar a nosotros. Entonces, hay medidas de políticas monetarias para incentivar ese crecimiento, y eso es lo que está haciendo el Banco Central”, expresó el mandatario en LA Semanal con la Prensa.
Asimismo, explicó cómo se garantizará que estos recursos lleguen a las Mipymes. “Esos recursos se distribuyen a través de las bancas, entonces ya es un tema que tenemos que, junto con el Banco Central y con la acción del Gobierno, facilitar vías de que lleguen especialmente a las Mipymes, a las medianas y pequeñas empresas”.
La medida, aprobada en sesión del 13 de junio de 2025, contempla la liberación de RD$50 mil millones del encaje legal, a ser canalizados por las entidades de intermediación financiera hacia sectores como construcción, manufactura, agropecuaria, exportaciones y Mipymes, con una tasa de interés máxima del 9 % anual y plazos de hasta dos años.
Asimismo, la habilitación de RD$14 mil millones no utilizados de una resolución anterior, también para sectores productivos, bajo las mismas condiciones; y el aplazamiento por seis meses del vencimiento de RD$17 mil millones en facilidades de liquidez rápida (FLR), evitando que los deudores sean obligados a refinanciarse a tasas más altas.
Destacar que según el Banco Central, la Junta Monetaria tomó en cuenta los niveles actuales de liquidez, la moderación del crédito privado y la estabilidad de los precios internos, para justificar esta inyección de liquidez. A pesar de los riesgos externos, los modelos macroeconómicos proyectan que la inflación permanecerá dentro del rango meta de 4 % ± 1 %, lo que permite adoptar políticas expansivas sin comprometer la estabilidad monetaria.
La medida también incluyó precisiones sobre los límites al financiamiento en moneda extranjera, excluyendo de estas restricciones las operaciones de comercio exterior a corto plazo y las actividades del sector turístico que perciben ingresos en pesos dominicanos.
Con este programa, el Gobierno y el Banco Central apuestan a una reactivación de la demanda interna mediante la expansión del crédito productivo, en momentos donde los choques externos comienzan a impactar el ritmo de la economía nacional.
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