Por Henry Zacarias y equipo editorial de Grupo Crónicas
San Juan de la Maguana – En un momento histórico para la defensa ecológica de la República Dominicana, el clero de la Diócesis de San Juan, encabezado por el Obispo Monseñor Tomás Alejo Concepción y respaldado por más de 40 sacerdotes y agentes pastorales, ha alzado su voz con fuerza, claridad y compromiso irrevocable en rechazo a las pretensiones de explotación minera en la Cordillera Central por parte de la empresa Gold Quest, con el aval de los Ministerios de Energía y Minas y Medio Ambiente.
Durante una rueda de prensa celebrada esta semana, el Obispo junto a su Comisión Diocesana de la Pastoral de Ecología y Medio Ambiente y en coordinación con el Movimiento Suroeste Unido por el Agua y la Vida, emitieron una declaración contundente, reafirmando su posición ya expresada en 2018 y 2022: el agua no se negocia, la vida no se vende, y la dignidad de los pueblos del sur no será hipotecada al interés minero.
⚠️ “No se trata de recursos, se trata de la vida misma”
Las alarmas se dispararon tras la aprobación de los Términos de Referencia (TDR) del proyecto “Romero”, situado en una zona de altísima fragilidad ambiental, justo donde nacen afluentes como el río San Juan y el arroyo La Guama, que alimentan el embalse de Sabaneta, fuente vital de agua potable y riego para las provincias de San Juan, Azua, Barahona y Bahoruco.
En palabras del Obispo Alejo:
“Quienes insisten en esta explotación, no están defendiendo el desarrollo, están atentando contra la vida. Lo que sucedió en Cotuí con la Barrick Gold debe servirnos de espejo. Allí destruyeron montañas, contaminaron aguas, y empobrecieron al pueblo con falsas promesas ecológicas. No permitiremos lo mismo en San Juan.”
🔍 El Clero en Bloque: pastores y comunidad cristiana unidos
El respaldo no se limita a la Iglesia Católica. Desde el Ministerio Pastoral de San Juan, conformado por alianzas interdenominacionales como la Confraternidad de Ministros Evangélicos de San Juan, la Unión Pastoral Visión de lo Alto, el Bloque de Pastores Unidos por Cristo, y la Comunidad Pastoral Esperanza Viva, se ha convocado de forma unánime a una gran Marcha Caminata por el Agua y la Vida.
🗓️ Fecha: Sábado 12 de julio 🕓 Hora: 4:00 p.m. 📍 Salida: Arco del Triunfo de San Juan
Esta manifestación será una muestra de unidad multisectorial, donde ciudadanos, organizaciones ecológicas, movimientos estudiantiles, agricultores, iglesias y líderes comunitarios dejarán en claro que el sur no está en venta, y que el pueblo está despierto, informado y de pie para defender sus ríos, montañas y comunidades.
📜 Marco legal y espiritual de la defensa
La declaración del clero no se fundamenta solo en principios morales o espirituales, sino en la legalidad vigente:
Artículo 15 de la Constitución: El agua es un bien de dominio público inalienable.
Ley 64-00 de Medio Ambiente: Obliga al Estado a proteger los recursos naturales y prevenir la degradación ambiental.
Encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco: “El medio ambiente es un préstamo que cada generación recibe y debe transmitir”.
💬 Llamado final: ni oro ni migajas, el pueblo elige vida
Monseñor Alejo y todo el liderazgo cristiano del suroeste dejan claro que el discurso de “progreso” de Gold Quest no es más que un espejismo con base en el extractivismo depredador. Las supuestas “migajas” de empleo o inversión no compensan los siglos de daño ecológico y humano que dejará una mina como esta en el mismo corazón de una región agrícola, rica en agua y biodiversidad.
En tanto que la maestra Evangelina de los Santos de la Rosa insistió al ser cuestionada por la prensa, de que aquí se defiende el agua y la vida con dignidad hasta las últimas consecuencias.
“Hoy más que nunca, el sur debe mirarse en el espejo de Cotuí. Que nadie crea que podrá comprar el alma de San Juan con promesas vacías. ¡Aquí se defiende el agua, la dignidad y la vida hasta las últimas consecuencias!” – Declaró la maestra Evangelina de los Santos de la Rosa.
Esta actividad minera representa el envenenamiento de toda el agua de consumo humano, la producción agrícola y la seguridad ambiental de las provincias de Azua, San Juan, Barahona y Bahoruco.
El comunicado subraya además los peligros de:
– Contaminación por metales pesados.
– Destrucción de suelos.
– Pérdida irreversible de biodiversidad endémica.
– Riesgos de catástrofes por fenómenos naturales.
Apelando a la Constitución dominicana (Art. 15) y a la Ley 64-00 sobre Medio Ambiente, la Diócesis llama al Estado a cumplir su deber de proteger las fuentes de agua y derecho inalienable del pueblo. Inspirados por las palabras del Papa Francisco en Laudato Si’, se recuerda que “el medio ambiente es un préstamo que cada generación recibe y debe transmitir”.