EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El fiscal del Distrito Nacional, Gerinaldo Contreras, fue destituido este martes por el Consejo Superior del Ministerio Público tras pruebas testimoniales que demuestran graves faltas cometidas en ejecución de sus funciones, que incluyen acoso laboral, lenguaje ofensivo y arresto de manera arbitraria a líderes comunitarios.
De acuerdo con la resolución Núm.07/204, a la cual Noticias SIN tuvo acceso, el Consejo detalló las acusaciones en contra de Contreras a partir de una serie de investigaciones.
El documento señala que el fiscal ordenó arrestar a cinco miembros de una junta de vecinos del sector Arroyo Hondo que exigían soluciones a problemas de basura, durante protestas pacíficas en la comunidad.
Los testimonios indican que Contreras ordenó a miembros de la policía, apresar a los integrantes de la protesta, calificando el acto como una “alteración del orden”.
La resolución señala que el día del incidente, el fiscal vociferó tener el control, situación que generó denuncias de abuso y poder por parte de los comunitarios.
Maltrato a sus empleados
Según los detalles del documento, el ambiente laboral bajo el mando del fiscal Contreras era de miedo y humillación hacia sus colaboradores.
El relato de dos empleadas indica que el acusado, en varias ocasiones las insultó y denigró su trabajo.
Cita textual primer testimonio: “: “Él me gritó frente a todo el personal: ‘¡Tú no sirves para nada! ¡Te voy a sacar de aquí porque esto me está quedando grande por gente como tú!’”.
Cita textual segundo testimonio: ““Nos trataba como si fuéramos basura. Nos decía: ‘¡Todos ustedes son unos inútiles, yo soy el único que sabe trabajar aquí!’”, relató.
De acuerdo con la resolución los empleados tenían miedo de denunciar lo sucedido por temor a perder sus puestos.
Por las acciones citadas anteriormente, el Consejo Superior, determinó que Contreras cometió faltas graves resumidas en:
Uso de lenguaje ofensivo e intimidante.
Orden de arresto sin fundamentos legales.
Abuso de su investidura para silenciar quejas legítimas del personal y de la ciudadanía.
Las faltas fueron calificadas como conducta incompatible con la dignidad del cargo y atentar contra los derechos de los ciudadanos.
Sin embargo, el fiscal Contreras negó las acusaciones y manifestó que se trata de una “campaña en su contra”.
La resolución puntualiza que el fiscal “mostró una conducta incompatible con la dignidad de su cargo y atentó contra derechos fundamentales de ciudadanos y miembros del Ministerio Público.”